Las fresas, fuente de vitamina C

Las fresas son una de las frutas de temporada por excelencia, por su sabor, su color, su aroma dulce e inconfundible y, sobre todo, sus propiedades. ¿Sabías que las fresas tienen una mayor cantidad de vitamina C que las naranjas?

Descubre por qué son tan buenas las fresas para nuestra salud, qué nutrientes aportan, cuál es la función de la vitamina C, cómo te las puedes comer y algunas curiosidades más sobre esta fruta.

Principales propiedades de las fresas: vitamina C y antioxidantes 

Una de las propiedades más importantes de las fresas es que son una fuente muy destacada de vitamina C, con un porcentaje superior al que nos aporta una naranja por 100g. Para que te hagas una idea, una ración media de fresas (150 g), contiene aproximadamente 86 mg de vitamina C, mientras que una naranja mediana (225 g) contiene 82 mg. Aun así, en ambos casos se supera la ingesta diaria recomendada de vitamina C que es de 60mg. Asimismo, las fresas contienen varios ácidos orgánicos como el ácido cítrico, el ácido málico o el ácido oxálico, responsables de su sabor.

Por otro lado, el color de la fresa se debe a unos pigmentos vegetales (flavonoides) conocidos como antocianinas. Es por estos pigmentos, junto con los polifenoles y la vitamina C, que las fresas son una de las frutas con mayor capacidad antioxidante. Además, las fresas te aportan una cantidad importante de fibra, pues ayuda a regular tu tránsito intestinal. Con respecto a los minerales, esta fruta roja contiene potasio, magnesio y magnesio. Finalmente, es un fruta rica en agua y baja en calorías. 

 Todo lo que debes saber sobre la vitamina C

Las vitaminas son un conjunto de sustancias consideradas para el normal y correcto funcionamiento del organismo. En el caso de la vitamina C, entre sus principales funciones destacan:

  • La síntesis de colágeno
  • La absorción intestinal del hierro
  • La formación de los cartílagos, huesos y dientes
  • La formación de las células inmunes.

Asimismo, la vitamina C destaca por sus propiedades antioxidantes que combaten el envejecimiento de las células y protegen de determinadas enfermedades cardiovasculares.

Respecto a su ingesta, se recomiendan 75 mg de vitamina C al día. Entre las principales fuentes de vitamina C destacan las frutas y las hortalizas, especialmente los cítricos  y las fresas o los tomates, los pimientos y el brócoli.

¿Cuándo y cómo comer esta fruta? 

Esta fruta roja es ideal para comer de postres después de la comida o cena o como tentempié a media mañana o para merendar. Puedes comértelas solas, en una macedonia con otras frutas, con un poco de zumo de naranja  -un súper cóctel de vitamina C- o bien a trocitos dentro de un yogurt.  Si lo prefieres, puedes preparar un smoothie o batido, un helado –una opción súper refrescante para el verano-, o añadirla en pequeños trozos en una ensalada.

Para conservarlas debes guardarlas en la nevera tapadas; en un tupper o un plato, por ejemplo, sin que se toquen entre ellas. Si te sobran fresas, las puedes congelar y utilizarlas más adelante para preparar alguna de las recetas que te hemos explicado. No te preocupes, porqué al congelarlas no pierden la vitamina C, ni otros de sus nutrientes.

Fresas y fresones, ¿cuál es la diferencia? 

Aunque pertenecen a la misma familia y género, las fresas y los fresones no son lo mismo. Tradicionalmente existía la fresa, la Fragaria vesca, pero durante la colonización los españoles descubrieron una nueva especie en Chile, la fragaria chilonensis. Del cruce de estas dos especies nació el conocido hoy como fresón. ¿Pero cuáles son las diferencias?

  • El tamaño: las fresas son más pequeñas en comparación con los fresones.
  • El sabor: las fresas tienen un sabor más intenso y un poco más ácido que los fresones.
  • El color: comparten el color rojo por fuera. Sin embargo, por dentro las fresas tienen un color más claro, mientras que el fresón mantiene el rojo vivo en el interior.
  • Conservación: las fresas, al ser más pequeñas, se conservan menos tiempo.

Aun siendo diferentes, la fresa y el fresón comparten las mismas propiedades y nutrientes: son una gran fuente de vitamina C, así como de antioxidantes. En Catalunya, la comarca del Maresme ha sido tradicionalmente, y lo sigue siendo ahora, una zona muy conocida para el cultivo de fresas.

En resumen, las fresas son una de las mejores frutas de temporada por su inconfundible sabor y sus beneficios para la salud. No dudes en incorporarla en tu dieta y recuerda que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir un mínimo de tres piezas de fruta al día.