¿Sabías que los espárragos blancos y verdes son la misma planta? En el siguiente artículo te contamos cuál es la principal diferencia entre estos dos tipos de espárragos, más allá de su color, y cuáles son sus beneficios para la salud. ¡Vamos!

Diferencias entre los espárragos verdes y blancos

¿Sabías que el color de los espárragos varía en función de cómo se cultivan? Si se cubren de tierra y quedan a oscuras hasta el momento de cosecharlos, serán blancos. En cambio, si se dejan crecer de forma natural, al aire libre y con luz del sol, ¡serán verdes!

Respecto a su sabor, los espárragos verdes tienen un toque más salado y amargo, mientras que los blancos son más dulces y tiernos. Sin duda, una hortaliza muy versátil con la que podrás preparar muchas recetas. Por ejemplo, los espárragos verdes finos son ideales para comer salteados, a la plancha o en tempura y los verdes gruesos al horno o a la brasa. En cambio, los espárragos blancos son ideales para preparar una crema o servirlos hervidos o a la pancha. Es importante que, antes de consumirlos, quites las dos primeras capas para que no sean amargos.

Finalmente, hay los espárragos violetas, muy similares a los verdes, pero con un sabor más dulce. Ideales para comer crudos, en una ensalada o a la parrilla.

4 beneficios de los espárragos

Ahora que ya sabes las diferencias, te contamos cuáles son sus principales propiedades. Esta hortaliza es una gran fuente de vitamina C y E, con propiedades antioxidantes muy importantes. Además, los espárragos tienen un alto contenido en agua y potasio, por lo que son muy diuréticos. También destaca su elevado contenido en fibra, que ayuda a tu microbiota intestinal.

 

Ahora que ya los sabes todo sobre los espárragos, disfruta de esta hortaliza tan deliciosa que se encuentra de plena temporada. En tu tienda habitual Ametller Origen y en la tienda online, encontrarás los espárragos verde más tiernos y frescos