¿Sabías que los espárragos son blancos o verdes en función de cómo se cultiven? Si se cubren de tierra y quedan a oscuras hasta el momento de cosecharlos, serán blancos. En cambio, si se dejan crecer de forma natural, al aire libre y con luz del sol, ¡serán verdes!

Ahora que ya lo sabes, te contamos cuáles son sus principales propiedades. Esta hortaliza es una gran fuente de vitamina C y E, con propiedades antioxidantes muy importantes. Además, los espárragos tienen un alto contenido en agua, por lo que son muy diuréticos. También destaca su elevado contenido en fibra, que ayuda a tu microbiota intestinal.

Respecto a su sabor, los espárragos verdes tienen un toque más salado y amargo, mientras que los blancos son más dulces y tiernos. Sin duda, una hortaliza muy versátil con la que podrás preparar muchas recetas. Por ejemplo, los espárragos verdes finos son ideales para comer salteados, a la plancha o en tempura y los verdes gruesos al horno o a la brasa. En cambio, los espárragos blancos son ideales para preparar una crema o servirlos hervidos o a la pancha. Es importante que, antes de consumirlos, quites las dos primeras capas para que no sean amargos.

Finalmente, hay los espárragos violetas, muy similares a los verdes, pero con un sabor más dulce. Ideales para comer crudos, en una ensalada o a la parrilla.

Recuerda que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el consumo de 400 g de fruta y de verdura cada día a través de un mínimo de tres frutas al día y una ración de verduras en la comida y otra en la cena.