Si te preguntamos cuáles son las frutas que más vitamina C contienen, estamos seguros de que nos dirás los cítricos, ¿no? Es cierto que las naranjas, mandarinas o limones son muy ricas en esta vitamina, pero es un falso mito que solo esté presente en este grupo de frutas. ¡A continuación te lo explicamos en detalle!
Frutas y verduras ricas en vitamina C
De entrada debes saber que la vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, se encuentra, en diferentes cantidades, en la mayoría de frutas, verduras y hortalizas frescas. Por tanto, no tienes que preocuparte cuando acabe la temporada de cítricos, porque tienes a tu alcance un montón de frutas y verduras ricas en esta vitamina. Especialmente, son ricas en vitamina C frutas como las fresas, que ahora se encuentran en plena temporada, los arándanos, las frambuesas, las moras o el melón y verduras y hortalizas como las espinacas, los tomates, el brócoli o el pimiento.
Para que te hagas una idea, las fresas o el brócoli te aportan un porcentaje superior de vitamina C respecto a una naranja (por 100 g de producto). Una ración media de fresas (150 g) contiene aproximadamente 86 mg de vitamina C, mientras que una naranja media (225 g) contiene 82 mg. En el caso del brócoli, una ración de esta verdura (200 g) contiene 106 mg de esta vitamina. Sin embargo, en los tres casos se supera la ingesta diaria recomendada de vitamina C, que es de 60 mg.
¿Cuál es la función de la vitamina C?
Las vitaminas son un conjunto de substancias consideradas esenciales para el normal y correcto funcionamiento del organismo. En el caso de la vitamina C, entre sus principales funciones destacan: la síntesis de colágeno, la absorción intestinal de hierro, la formación de los cartílagos, huesos y dientes o la formación de las células inmunes. Sin embargo, la vitamina C destaca por sus propiedades antioxidantes que combaten el envejecimiento de las células y protegen determinadas enfermedades.