De forma alargada y poco grosor, la cebolleta es una de las verduras más antiguas que existen. Aunque se parece a la cebolla y te puede recordar a los calçots o al puerro, la cebolleta es una hortaliza con personalidad propia; un sabor dulce y delicado, fuente de nutrientes y versatilidad en la cocina.

¿Qué se aprovecha de la cebolleta?

¡Todo! Pero vayamos por partes: la cebolleta está formada por la parte inferior blanca, parecida a una cebolla, y la parte superior con las hojas verdes. La tendencia es aprovechar la parte blanca, ya sea para consumir en crudo en una ensalada o macerada en vinagre, por ejemplo, o como base de un sofrito o en un caldo. En cambio, a menudo tendemos a tirar las hojas, cuando son una fuente de nutrientes, como por ejemplo magnesio, y nos pueden servir para preparar deliciosos platos. ¡Te lo contamos a continuación!

Las hojas verdes de la cebolleta si están frescas son muy tiernas y las puedes utilizar para incorporar en sofritos, picaditas en tus salsas, en un revuelto de huevo, crudas dentro de una ensalada o en un caldo o sopa. Esta parte de la cebolleta es famosa por usarse en una de las recetas más conocidas de la cocina japonesa: la sopar de miso. ¿No te has fijado que este caldo siempre incorpora pequeñas rodajas de cebolleta? En el caso que las hojas verdes sean un poco más gruesas, te recomendamos que las consumas cocidas, pues crudas pueden resultar un poco fibrosas. En una sopa, un caldo o salteado con un poco de ajo están deliciosas.

Ahora que ya sabes que puedes aprovechar todas las partes de la cebolleta, te animamos a incorporarla en tus platos, a la vez que ¡ayudas a reducir el desperdicio alimentario!

¿Qué diferencia hay entre esta verdura y una cebolla?

  • Crecimiento de la planta: la cebolleta nunca forma bulbos, mientras que la cebolla sí.
  • Tamaño: la cebolleta es alargada y de poco grosor, en comparación con la cebolla que es mucho más grande.
  • Sabor: la cebolleta es más suave y puede tener un punto dulce, mientras que el sabor de la cebolla es fuerte y puede llegar a ser picante.
  • Almacenamiento: la cebolleta debes guardarla en el frigorífico, en cambio, la cebolla no hace falta que la almacenes en la nevera, pero sí en un lugar seco y ventilado, y siempre sin lavar.

¿Qué vitaminas tiene la cebolleta?

La cebolleta destaca por su aporte en vitamina C: para que te hagas una idea, una ración de cebolleta cubre el 48% de las ingestas recomendadas para un hombre y una mujer con una práctica moderada de actividad física. Esta vitamina te ayuda en la protección de las células, es un potente  antioxidante y te ayuda en la absorción del hierro.

Otros beneficios de esta verdura

Asimismo, la cebolleta es rica en fibra, que te ayuda a regular tu tránsito intestinal y evita el estreñimiento, así como rica en minerales como el potasio, hierro y yodo, esenciales para tu organismo.

¿Por qué lloramos cuando pelamos una cebolleta?  

Estamos seguros de que te has hecho esta pregunta más de una vez. Pues debes saber que la cebolleta, igual que otros vegetales de la misma familia como la cebolla, el puerro o la chalota, contienen unos compuestos azufrados (con azufre) que se liberan cuando la cortamos. Estos compuestos llegan a los ojos y producen picor y nuestro cuerpo reacciona con las lágrimas para proteger los ojos. ¿Curioso, verdad?

Asimismo, el azufre también es el responsable del sabor y olor característico de esta hortaliza.

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